El mundo de las letras despide a uno de sus más grandes exponentes. Mario Vargas Llosa, escritor peruano y Premio Nobel de Literatura en 2010, falleció este pasado domingo 13 de abril en Lima, a los 89 años, rodeado de su familia. La noticia fue confirmada por sus hijos, quienes anunciaron que, en cumplimiento de su voluntad, no se celebrará ninguna ceremonia pública y sus restos serán incinerados en privado.

Vargas Llosa nació en Arequipa en 1936, convirtiéndose en una figura central del “boom latinoamericano”, movimiento literario que surgió entre 1967 y 1976 que revolucionó la narrativa en español durante la segunda mitad del siglo XX y en el que el literato fue una figura primordial. Este fue el movimiento más importante de la literatura española durante la segunda mitad del siglo XX.
Su obra, caracterizada por una prosa vibrante, el “realismo mágico” y un agudo análisis de las estructuras de poder, incluye títulos tan emblemáticos como La ciudad y los perros (1963), Conversación en la catedral (1969), La casa verde (1966) y La fiesta del Chivo (2000). También escribió ensayos, como La tentación de lo imposible (2004), Rumbo a la libertad (2005) o Sables y utopía (2009).
A lo largo de su carrera, Vargas Llosa recibió numerosos reconocimientos, como los premios Planeta (1993) o Cervantes (1994), siendo el más destacado el Premio Nobel de Literatura en 2010, otorgado por su “cartografía de las estructuras de poder y aceradas imágenes de la resistencia individual, la revuelta y la derrota”. Además, fue miembro de la Academia Peruana de la Lengua y de la Real Academia Española, y obtuvo la nacionalidad española en 1993.
Más allá de su faceta literaria, Vargas Llosa incursionó en la política, presentándose como candidato a la presidencia de Perú en 1990, aunque sin éxito. Su pensamiento liberal y su crítica al autoritarismo marcaron su trayectoria como intelectual comprometido con los debates contemporáneos.
Su vida personal también fue objeto de atención mediática, especialmente por su relación con Isabel Preysler entre 2015 y 2022. Su última novela, Le dedico mi silencio, publicada en 2023, fue considerada su despedida de la ficción. Tras una carrera con grandes reconocimientos, fue el primer autor de lengua española en ingresar en la Academia de la Lengua de Francia.
La noticia de su fallecimiento ha generado una ola de reacciones en el ámbito político y cultural. La presidenta de Perú, Dina Boluarte, ha destacado su legado literario imperecedero, mientras que, en España, el presidente Pedro Sánchez, la Casa Real y otros líderes políticos han subrayado su contribución decisiva a la literatura universal.
Mario Vargas Llosa deja una vasta y profunda obra que seguirá inspirado a generaciones futuras, consolidando su lugar como una figura icónica de la lengua española.